Por el viejo sendero que va al castillo,
entre olivos y almendros ya florecidos,
amapolas de rojo, y de amarillo,
al filo de venero, de león dientecillos.
Con su verde esmeralda, cebadas trigos,
al vaivén del soplido del monte amigo,
van pintando en mis ojos colores vivos
con aroma de romero, y flor de tomillo.
Florecillas almendros con los zumbidos,
de abejillas, de insectos y algún pajarillo,
que corteja a la hembra ¡preciosos trinos!
Por el blanco sendero que va al castillo,
juega el viento en su pelo y su vestido,
¡Yo! Un puñado de sueños en el bolsillo.
¡Esta noche seguro cantaran grillos!
Si tu quieres amor vendré contigo,
¡A la Luz de la Luna versos suspiros!
Antonio Villegas Martin
19/03/23
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