domingo, 6 de octubre de 2013

EGOÍSMO Y DINERO LACRA DE LA HUMANIDAD

           

              ¡Ay, pena de la humanidad!
Egoísmo y dinero,
lacra de todos los tiempos
que anula nuestra ternura
y nos convierte
en torpes seres siniestros,
capaces de convertir
los mares en cementerios.

Desde la bahía de Cádiz
hasta las islas del Egeo
que negra se ve la mar
parece que este sufriendo.

Las gaviotas no vuelan
 no quieren surcar los vientos
llenos de gritos que claman,
que se ahogan,
queriendo arañar el cielo.

Las olas baten las rocas
con la ira de los muertos,
llenas de almas sin brillo
y de ilusiones sin tiempo.

Y en las playas doradas
donde el amor tenía reino,
                  se llenan de calaveras
que desafían al tiempo,

Despojadas de su tez
oscura de cuerpos negros,
que claman desde sus dientes
¡Somos iguales por dentro!

 ¡ Ay! Pena de la humanidad!

Torpe redil de borregos
mirando como degollan
a nuestros brotes más tiernos

El ansia que nos creó,
que nos dio el entendimiento,
no descansara en el tiempo
y pagaremos seguro nuestro
egoísmo de cerdos. 






2 comentarios:

  1. No había tenido oportunidad de leerte en esta forma tan contundente de denuncia y compromiso y me ha gustado. Fuerte el poema pero en total consonancia con la dura realidad que lo inspira. Te felicito una vez más, Antonio.

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  2. Un buen poema Antonio,

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