nadie sabe que es robada,
la canta para la flor
y del ruiseñor es nana.
Bailan los cielos de azul
con nubecillas aladas,
las notas de su compas
los versos de esta tonada.
Y por la noche la luna
sale radiante plateada.
Cuentan que allá entre estrellas
sueña corriendo, alocada.
Para llegar a la cumbre
donde el viento seductor
silva entre rocas y jara,
las notas de una balada.
¡Canta el viento una canción!
¡Nadie sabe que es robada!
Más cuando llega la luz
alumbrando la mañana,
halla al viento picarón
con la oreja en la ventana.
Es la casa de Paquita
que canta cada mañana,
sabe que el viento espera
su canto cada alborada.
Para que sueñe la vida
amaneceres de amor,
tardes de rosa y naranja,
con noches, de luna clara.
¡Canta Paquita!
Para que el viento nos bañe,
con tu voz enamorada.
Antonio Villegas Martín
27/02/24